VÉRTIGO ROCK FESTIVAL: Ermua – 13 y 14/05/2022.

Intenso fin de semana cargado de metal el que se nos presentaba en el festival vizcaíno Vértigo Rock, que tras dos años en blanco, pero con una edición en formato reducido, se presentaba en este 2022 con un cartelazo.

Su XIV edición, ubicada un año más en Betiondo, presentaba dos grandes novedades con respecto a ediciones anteriores. Por un lado, sería la primera vez que el festival contara con dos días y por otro, también la primera vez que contaban con una banda internacional.

Con cuatro bandas programadas para el viernes, se daba el pistoletazo de salida. A pesar de que era el día perfecto para los amantes del metal extremo, con Nakkiga, Cerebral Effusion, Wormed y Teething, un gran número de personas se congregaba en el recinto, superando con creces las previsiones para ese día.

Nosotros por horarios laborales no pudimos asistir a la puesta en escena de Nakkiga, y llegamos para el segundo directo de la noche con Cerebral Effusion. Esta banda vasca de brutal death metal presentaba en Betiondo su último lanzamiento, “Ominous Flesh Discipline”, publicado en agosto del 2021, y del que dieron buena cuenta, aunque también para disfrute de su público, pudimos disfrutar de grandes trallazos como “Humilliation Through Methodical Submission” o “Epidemic Of The Era”.

A la hora prevista, llegó el turno de los madrileños Wormed. Sin duda, fueron el reclamo para muchos en esta primera jornada, y pusieron el listón muy alto con su Death Metal sin contemplaciones. Pasaron como una apisonadora en el tiempo que dispusieron sobre el escenario, con temas como “Bionic” o “Tautochrone”.

Para cerrar la noche llegaban los madrileños Teething. Si bien es cierto que hubo gente que se marchó antes de su comienzo, tratando de guardar fuerzas para el día siguiente, aquellos que se quedaron no se sintieron decepcionados viendo su puesta en escena. Si pensábamos que podríamos relajarnos con su directo, estábamos equivocados. Con su arrolladora energía y temas como “Filipino Violence”, se ganaron más de un seguidor esa noche.


Larga jornada la que nos esperaba para el sábado, que arrancaría con la banda local Slide. No pueden faltar las bandas locales en el Vértigo Rock y esta edición no iba a ser menos. Ellos tuvieron la difícil papeleta de empezar la jornada del sábado, aunque estuvieron bien arropados por familiares y amigos.

Con gente llegando a Betiondo constantemente, la segunda banda en salir al escenario fueron los barceloneses Blaze Out. Disfrutamos de temas de su último lanzamiento discográfico, “Instinct”, como “Toxic AF” o “Savage Blue”, así como de sus temas más clásicos que les acompañan en todos sus directos como “Attack On Titan” o “Red Silence”.

Con el tiempo para vaciar depósitos y tomar un refrigerio, llegaba el turno de Incursed. Con su pagan/folk metal llegaba la fiesta al Vértigo y no decepcionaron. Siguen inmersos en la presentación de su último álbum “Baskavígin”, del que nos dieron un buen repaso, y del que destacamos su tema principal, en el que se narra la historia de la matanza de 32 pescadores de ballenas vascos en Islandia, allá por 1615.

Tras los pequeños problemas surgidos por la meteorología y un rato de lluvia, el sol volvía a brillar y lo hacía mientras se subían a las tablas Ehun Kilo. Si hablamos de heavy vasco, es inevitable nombrar a este quinteto procedente de Elgoibar. El gran número de camisetas que se veía entre el público presente, hacía prever que eran uno de los grandes alicientes de la jornada. Se corearon cada uno de sus temas, entre los que podemos destacar grandes clásicos de la banda como ”Mendekua”, “Tango Feroz” o “Bihotz Lapurra”. Fue un concierto cargado de sentimientos, ya que, muy probablemente, era su despedida de los escenarios.

Bien entrada la tarde, llegaba el turno de la banda bilbaína Rise To Fall, que más de dos años después, volvía a subirse a un escenario. Era una de las bandas que teníamos ganas de volver a verles en acción y no defraudaron. A pesar de algunos pequeños problemas, se marcaron un auténtico directazo de principio a fin. No se dejaron nada en el tintero y sacaron a relucir toda su artillería pesada. Cayeron temas como “The Descendant”“End Vs Beginning”, “Redrum”, “Parasites” o “Acid Drops”, poniendo la guinda con “The Threshold” y “Decoding Reality”.

Con todo el subidón, llegaba la hora del plato fuerte del festival. Los franceses Dagoba se presentaban en Ermua con su reciente gira europea terminada, y con el aliciente de ser una de los dos únicas fechas en territorio nacional, junto al Resurrection Fest, donde actuarían tras cancelarse las fechas de conciertos en sala junto a Infected Rain.

Acompañados de un gran sonido, Shawter y los suyos se cascaron un auténtico bolazo de principio a fin, sin darnos respiro alguno. “The Hunt” o “Sunfall” servían como carta de presentación a su último álbum “By Night”, aunque no tardaron en poner patas arriba todo el recinto. Con trallazos como “Black Smokers (752° Fahrenheit)” o “Inner Sun” llegaban los mosh pits en la parte delantera, que no cesaron en toda su actuación.

Para su concierto de Ermua, contaron con Zed Terzibachian a la guitarra, por la baja temporal de Ritch, estando a la altura de sus compañeros. Sin margen para recuperarnos, “The Sunset Curse” o “Stone Ocean” fueron las siguientes en caer, para después de un pequeño respiro, volver de nuevo al escenario cerrando su impecable directo con “Maniak”, “Great Wonder” y “The Thing Within”.

Pasadas las 23:30 de la noche, llegaba el turno de Vita Imana. No era fácil mantener el nivel de intensidad mostrado por la banda francesa, aunque el sexteto madrileño se mueve de maravilla en esos ámbitos, siendo una banda que no se guarda nada en la retaguardia. Con trallazos como “No En Mi Nombre”, “Desfiguradas” o “Romper Con Todo”, dejaron bien claro cómo se las gastan.

La banda local Cien Duros fueron los encargados de cerrar la noche y el festival. En nuestro caso, el cansancio de los dos días hizo mella y no pudimos disfrutar más que de su primer tema.

Queremos felicitar a su organización por el festival que han sacado adelante, demostrando que su pasión por la música, así como el empeño y cariño que ponen en ello, está por encima de los pequeños problemas que se les ponen en el camino.

Agradecerles una vez más el hacernos sentir como parte del festival, para nosotros el Vértigo ya es más que un evento y, sin duda alguna, disfrutaremos de él siempre que podamos. ¡¡Nos vemos en el 2023!!

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Texto y Fotos: Lakatus.

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